No hace falta ser cirujano ocular u obseso de la limpieza para darse cuenta de que abrir un paquete nuevo y estéril de lentillas cada día reduce el riesgo de infección en comparación con las lentillas reutilizables, que requieren un almacenamiento, tratamiento y limpieza cuidadosos.
Solo por el hecho de que las lentillas diarias no están diseñadas para reutilizarse, pueden hacerse más finas y flexibles. Esto significa que se adaptan mejor a la forma única de tus ojos. ¡Se te olvidará que las llevas puestas!
Tus ojos necesitan que tus lentillas dejen pasar oxígeno. La permeabilidad al O2 no tiene tiempo para reducirse cuando hablamos de lentillas diarias, gracias a la corta vida que tienen. Al contrario ocurre con las lentillas mensuales, cuyos niveles de permeabilidad al O2 van decreciendo poco a poco con cada uso.
Para minimizar el riesgo de infección con las lentillas mensuales, debes llevar a cabo un mantenimiento muy estricto con ellas. Con las Lentillas Diarias Hawkers puedes olvidarte de todas esas chorradas - ¡Hay cosas más importantes que hacer por la mañana!